La comarca de la Ribera del Duero puede presumir de una cuidada y consolidada gastronomía, en la que calidad de sus materias primas, buen gusto, tradición y la maestría de sus cocineros se unen para ofrecer una cocina con personalidad propia.
La gastronomía ribereña está íntimamente relacionada con la explotación agroganadera en la que destacan el cultivo de vid y cereales y la ganadería del porcino y el ovino.
Uno de los principales protagonistas de los fogones es el cordero lechal o lechazo asado a 180ª con leña de encina, en hornos de barro, un productos natural, bajo en grasas y gran sabor y que ha obtenido, gracias a su calidad, La Indicación Geográfica Protegida “Lechazo de Castilla Y León”, sin olvidar las Chuletillas Asadas sobre la brasa de sarmiento, la morcilla de Burgos, el chorizo, las setas de cardo, la Sopa Castellana, la perdiz, la liebre, el conejo, la codorniz o los quesos - Marca de Garantía “Quesos Región del Duero”. Todo ello complementado por sus deliciosos postres: Empiñonados, Hojaldres, Yemas, Tortas de aceite, Rosquillas…