La Ruta del Vino Ribera del Duero se extiende por unos 115 kms; comarca natural de relieves alomados y vegas fértiles gracias al río Duero, se encuentra en el centro de la Península Ibérica, en la Comunidad Autónoma de Castilla y León y abarca más de 100 pueblos de las provincias de Burgos, Segovia, Soria y Valladolid. Se puede acceder por transporte público –cuenta con estaciones de autobús en sus principales poblaciones-, por carretera -autovía A1 o la N-122, que comunica Aragón con Castilla y León y Portugal a través del Valle del Duero, además de contar con los aeropuertos de Valladolid (a 100 Km.) y Burgos (a 90 Km.).
Bajo la DO Ribera del Duero -30 años de existencia- se encuentran bodegas subterráneas que transportan a los orígenes del vino y a la tradición de las familias bodegueras en perfecta armonía con una arquitectura vanguardista, un patrimonio cultural y parajes naturales donde realizar catas en bodegas, visitas a museos, degustaciones culinarias, paseos entre viñedos, tratamientos de salud y belleza (vinoterapia)… Hay una Ruta para cada persona.
El vino, con más de 900 marcas -Rosados, Tintos Jóvenes, Crianzas, Reservas y Grandes Reservas- son imagen de 8000 vinicultores y aproximadamente 270 bodegas, es patrimonio de todos los ribereños que conservan sus orígenes en los lagares y bodegas tradicionales llevando al visitante a un túnel del tiempo en el que apreciar la magia de la elaboración de los vinos.
La uva utilizada por excelencia es la tempranillo, aporta el color, el aroma y el cuerpo a estos excelentes vinos, si bien el Consejo Regulador permite la utilización de otras variedades como Cabernet-Sauvignon, Garnacha tinta, Merlot y Malbec -en tintos-, y la Albillo en blancos.